La Coordinadora Nacional de Pueblos Indígenas de Panamá COONAPIP insiste que ya no hay más nada que consultar, el pueblo ya habló claro y con fuerza en las calles y el único camino para resolver la crisis generada por el contrato de ley minero es la “derogación”.
La organización indígena lamenta que las autoridades de gobierno sigan tomando medidas dilatorias sin escuchar la voz del pueblo que al unísono pide la derogación de la ley 406.
“Así como se aprobó la ley a tambor batiente, de manera expedita, se necesita la acción del gobierno que derogue el contrato ley ya que es la única manera que la situación vuelva a la normalidad en el país”, advierten los dirigentes de COONAPIP.
Los líderes originarios también piden a la Corte Suprema de Justicia que actúen con carácter de urgencia y fallen la demanda de inconstitucionalidad que sigue siendo una salida para la inestabilidad que reina en el país con efectos de graves consecuencias en todo el quehacer nacional.
“Los diferentes sectores representativos del pueblo panameño no quieren más engaños, quieren la derogatoria del contrato ley 406 y la moratoria definitiva de cualquier proyecto minero que pone en peligro la biodiversidad y la vida misma de la presente y futura generación, y sobre todo, en las regiones más vulnerables de los territorios indígenas”, advierten los líderes de COONAPIP.
Por otro lado, la Coordinadora expresa claramente que no acepta ni tolera los actos vandálicos que empañan la lucha e insta al pueblo a que haga valer sus derechos de manera pacífica, sin violencia.
«En cuanto no haya respuestas, seguiremos apoyando las protestas pacíficas y aumentando el pie de fuerza de los hermanos indígenas a nivel nacional, hasta cumplir con el mandato del soberano ‘la derogatoria de la ley 406′», concluye la dirigencia de COONAPIP.
