La viceministra de Salud, Ivette Berrío, destacó en la reunión del Programa de Naciones Unidas contra la droga y el delito de los esfuerzos del gobierno, en garantizar la salud y la protección de la población, para evitar la pérdida de vidas a causa de este flagelo.
Berrío aprovechó para destacar que Panamá mantiene un programa eficiente de vacunación masiva a corto plazo, para prevenir los efectos de la pandemia y resaltó que este hecho ha sido reconocido a nivel internacional.
“Panamá fue uno de los primeros países en la región en alcanzar condiciones adecuadas para propiciar la reapertura segura y la tan anhelada reactivación económica”, manifestó Berrío.
Sin embargo, señaló la viceministra, que el evento pandémico también abrió oportunidades para el narcotráfico, el crimen organizado, lo que llevó al desarrollo de nuevas actividades delictivas, aprovechando precisamente las vulnerabilidades y necesidades de la institucionalidad nacional, regional e internacional, pero que fueron detectadas y subsanadas.
Los grupos delictivos aumentaron sus recursos y las actividades delictivas con estrategias innovadoras, mencionó la viceministra, quien agregó que esto ha redefinido el mapa universal de la lucha constante realizada a nivel mundial contra dicho flagelo.
En la presentación del informe Berrío señaló las acciones de Panamá, las cuales reiteran el compromiso del país para la implementación de los acuerdos internacionales sobre políticas en contra de las drogas.
“Esperamos que el examen de mitad de período, que tendrá lugar en 2024, nos permita hacer un balance y realizar los ajustes que el contexto actual nos exige para enfrentar este reto de escala global con mayor eficacia”, dijo Berrío.
Agregó también que en Panamá, se enfrenta además lo que significa la posición geográfica, ya que nos ubica en medio de productores y grandes mercados de consumo para el tráfico tanto de estupefacientes, como de migrantes y en la trata de personas.
El fenómeno migratorio se ha traducido en un fenómeno que ha dejado en evidencia la profundidad de la crisis postpandemia y ha dimensionado la capacidad de diálogo transfronterizo, buscando el fortalecimiento de la cooperación internacional, además del intercambio de buenas prácticas y capacidades técnicas entre naciones y consolidar nuevos esquemas de cooperación multilateral, a favor del desarrollo sostenible, la paz y la seguridad.
Panamá cuenta con un mecanismo de coordinación y articulación, entre instituciones para realizar una estrategia nacional contra las drogas, implementada desde la Comisión Nacional para el Estudio y la Prevención de los Delitos Relacionados con Drogas (Conapred), que coordina las áreas de reducción de la oferta y demanda, además de realizar programas de desarrollo alternativo integral y sostenible, así como medidas de control, observatorio de drogas, cooperación internacional y evaluación de programas, destacó la viceministra.
En la actualidad se dio extensión a la vigencia de la Estrategia Nacional sobre Drogas 2012-2017, donde la institución se encuentra trabajando en la actualización de la Política nacional de Drogas que ha demostrado resultados eficientes y eficaces, alineados con la Estrategia hemisférica de Drogas de Cicad.
Sobre la reducción del consumo de drogas, mencionó que durante el 2022 se llevaron a cabo programas para capacitar a profesionales diversos en tratamiento y prevención de drogas, además de talleres para el tratamiento de abuso de sustancias; en incautaciones, el país cerró 2022 con 128,663 paquetes de droga incautados (más de 128 toneladas) decomisadas en 400 operativos. Que llevó a la captura de 623 personas.
