Por Redacción Panorama Económico
Mientras los principales gremios privados aseguran que paralizar todo un país «no es la vía correcta», obreros de la construcción, transportistas, universitarios, indígenas y docentes anunciaron que intensificarán las medidas de fuerza con huelgas y protestas en las calles.
La Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresas (Apede) señala que «paralizar todo un país no es la vía correcta para resolver las sentidas necesidades de los panameños».
Contrario a eso, el secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción y Similares (Suntracs), Saúl Mendez, anunció protestas en las calles y una huelga desde el miércoles en la industria de la construcción.
Por su parte, el Sindicato de Industriales de Panamá (Sip) en un comunicado hace un «llamado urgente» a las autoridades del gobierno para que intercedan ante la paralización de la cadena de suministros y las graves afectaciones a la economía panameña que han traído las medidas de fuerza de diversos sectores.
El gobierno ayer convocó a una mesa de trabajo para atender el alto costo del combustible que de manera directa impacta la canasta básica.
Las reuniones iniciarán mañana lunes a las 10:00 a.m. en el centro de Convenciones Coopeve en Santiago de Veraguas.
Otros de los gremios que se pronunció fue la Asociación de Profesores de la Universidad de Panamá que hizo un llamado a la administración de ese estudios superiores para que convoque a los órganos de gobierno a una asamblea general universitaria que «debata candentemente» los problemas actuales.
También las agrupaciones de docentes aseguraron que se mantienen el paro de labores hasta que se den soluciones concretas a las demandas de la ciudadanía.
En tanto, las provincias de Chiriquí y Bocas del Toro se encuentran prácticamente incomunicadas vía terrestre tras la suspensión de operaciones del transporte de pasajeros hacia la ciudad capital y viceversa por los cierres de la vía Interamericana en el Oriente Chiricano y Veraguas por parte de grupos indígenas.
Por otro lado, las asociaciones de enfermeras y médicos se declaron en “estado de alerta” para que se atiendan las peticiones de diversos sectores de la sociedad que exige medidas urgentes ante los elevados precios de los combustibles y el costo de la vida.