● La compañía chilena consolida su liderazgo en electromovilidad con una inversión de US$ 10,6 millones en el Metrobús de Ciudad de México.
Redacción – Panorama Económico
Ciudad de Panamá. – La tecnológica chilena SONDA continúa su expansión en América Latina con un fuerte enfoque en electromovilidad, destacando su más reciente proyecto en México. En enero de este año, la empresa implementó la infraestructura necesaria para instalar y operar estaciones de carga eléctrica en los patios estratégicos de las líneas 2, 5 y 6 del sistema Metrobús, en la capital mexicana
Desde 2022, SONDA ha estado desarrollando soluciones para una flota de 823 buses de dos pisos en México. Con este nuevo hito, logró sumar más de 258 estaciones de carga que abastecerán a los autobuses eléctricos que operan en el Distrito Federal, marcando el primer gran proyecto de esta naturaleza en el país.
Juan Andrés Abrigo, ejecutivo regional de ventas de electromovilidad de SONDA, destaco que México está en la dinámica de ir creciendo en electromovilidad, donde este avance responde tanto al envejecimiento de la flota diésel como a las exigencias gubernamentales en materia de reducción de emisiones.

Infraestructura para un futuro sostenible
El objetivo del proyecto es acelerar la transición hacia un transporte público sostenible, con una operación eficiente y continua de autobuses eléctricos biarticulados. La obra incluyó la construcción civil y eléctrica de patios, instalación de cargadores y montaje de sistemas de distribución de energía, todo ejecutado en tan solo tres meses.
El proyecto, que demandó una inversión de US$ 10,6 millones, contempla una duración total de ocho años, incluyendo mantenimiento de los cargadores. Según Abrigo, el éxito del despliegue se debe a la preparación anticipada del sistema eléctrico mexicano, que permitió conectar la infraestructura rápidamente.
Ahorro económico y ambiental
Además del impacto ambiental, el proyecto representa importantes beneficios económicos. Se estima un ahorro del 70% en costos operativos frente a flotas diésel, gracias al menor gasto en combustible y mantenimiento. A largo plazo, el costo operativo puede pasar de 100 a solo 30, explicó Abrigo.
Desde el punto de vista ambiental, la iniciativa evitará la emisión de más de 57.000 toneladas de CO₂ en los próximos diez años, además de reducir considerablemente la contaminación acústica, mejorando la calidad de vida de millones de usuarios.
Perspectivas regionales
SONDA ha expresado su interés en replicar esta solución en otros países. Actualmente, recibe consultas desde Paraguay y proyecta avances en Argentina y Uruguay, siendo este último el mercado más cercano a concretar una implementación similar.