El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Asiático de Desarrollo (ADB por sus siglas en inglés) firmaron un nuevo acuerdo de intercambio de exposición soberano por un valor de US$1.500 millones. Esta transacción es una forma innovadora de fortalecer el capital de los bancos multilaterales de desarrollo (BMD) y aumentar su capacidad crediticia.
Este intercambio representa el segundo acuerdo de este tipo entre el BID y ADB. El primero fue un piloto realizado en diciembre de 2020, luego de que el ADB aprobara el marco de política para los intercambios de exposición con otros organismos multilaterales.
“Estamos muy entusiasmados con este nuevo acuerdo con ADB y con encontrar nuevas formas para optimizar aún más la hoja de balance del BID. Estos esfuerzos fortalecen nuestra resiliencia frente a eventualidades y aumentan la capacidad de préstamos para el desarrollo. En el BID hemos sido pioneros en estos temas, cumpliendo los mandatos del G20 para una mayor eficiencia financiera, y reiteramos nuestro compromiso de continuar implementando instrumentos financieros innovadores” comentó Gustavo De Rosa, Vicepresidente de Finanzas y Administración, y Oficial Principal Financiero del BID.
“Este acuerdo es un excelente ejemplo de innovación para hacer que la gestión de capital del ADB sea más eficiente y aumentar su capacidad de préstamo, en línea con la Revisión Independiente del Grupo de los Veinte de los Marcos de Adecuación de Capital de los BMD”. dijo la vicepresidenta de Finanzas y Gestión de Riesgos de ADB, Roberta Casali.
Un intercambio de exposición es una herramienta que brinda alivio de capital para los BMD centrados en garantías soberanas. Ocurre mediante el intercambio de exposiciones crediticias concentradas con exposición a países donde la exposición crediticia es menor o inexistente.
Son una forma poderosa y rentable de mejorar la suficiencia de capital y la solvencia de los BMD regionales, cuyas opciones de diversificación de cartera pueden verse limitadas.
El intercambio será «sintético» ya que no implica la transferencia real ni la eliminación de préstamos de la hoja de balance de ninguna de las partes y no cambia la relación entre el prestamista original y el prestatario.
