Ciudad de Panamá. – Mediante una resolución el Parlamento Latinoamericano y Caribeño (Parlatino) ratifica su postura de total rechazo a todo tipo de medidas coercitivas unilaterales, independientemente del Estado o institución de que provengan y de a qué materia se refieran, por ser claramente atentatorias contra los principios del derecho internacional y la Carta de las Naciones Unidas”.
A su vez el organismo exhorta a los Parlamentos de América Latina y el Caribe, así como a la comunidad regional e internacional, a tomar las medidas necesarias, conjuntamente con los Ejecutivos de los Estados para, mediante la colaboración, la solidaridad y el apoyo mutuo, sustraerse a estas presiones ilícitas y negarse a ser cómplices de dichas acciones coercitivas contra terceros, que atentan contra el desarrollo de las naciones y el bien común.”
Recientemente se han vertido expresiones preocupantes que, de materializarse, afectarían el ejercicio pleno de la soberanía de la República de Panamá sobre su Canal.
Por dicha situación el Parlatino sostiene que, la devolución del Canal a Panamá el 31 de diciembre de 1999, es consecuencia de la lucha que el pueblo panameño libró en las calles, de los reclamos de sus gobiernos en distintas épocas por la vía diplomática bilateral y multilateral, la que fue respaldada por la comunidad latinoamericana y a nivel global, y de los acercamientos entre Panamá y los Estados Unidos de América, como lo fue el Acuerdo Tack-Kissenger firmado en la administración del presidente republicano Richard Nixon que permitió las negociaciones entre ambas naciones que dieron lugar a la firma de los Tratados Torrijos-Carter en la sede de la Organización de los Estados Americanos en Washington DC el 7 de septiembre de 1977, aprobado por los ejecutivos de ambos Estados y por el Congreso de los Estados Unidos de América.
Ante este hecho que se ha registrado a nivel internacional el Parlatino declarar el respaldo al Gobierno, al Parlamento y al pueblo panameño en el ejercicio pleno de la soberanía nacional sobre todo su territorio y particularmente de la administración de su Canal, en apego a lo dispuesto en el Tratado de Neutralidad, suscrito por Panamá, los Estados Unidos de América y una pluralidad de Estados.
Finalmente, el Parlatino exhortamos a que Panamá continúe administrando la vía acuática de forma eficiente y segura para beneficio del comercio mundial y siga ofreciendo las garantías de neutralidad que hasta ahora ha demostrado.