Shanghái (China), 13 jun (EFE).- La mayoría de fabricantes chinos de automóviles subieron este jueves en los primeros minutos de la sesión bursátil tras el anticipado anuncio de aranceles adicionales a los eléctricos importados del país asiático, que finalmente serán algo más bajos de lo que habían avanzado algunos medios.
Concretamente, hacia las 10.30 hora local (02.30 GMT), el mayor vendedor de eléctricos del mundo, BYD, lideraba las ganancias en el referencial de la Bolsa de Hong Kong con un repunte del 7,64 %, ya que recibirá unos aranceles más bajos (del 17,4 % frente a la media del 21 %) tras cooperar con la investigación.
También sube Geely (+3,37 %), otra de las que afrontará aranceles adicionales algo inferiores a la media, en su caso del 20 %.
En el parqué de la antigua colonia británica, también subían otras firmas como Nio (+1,6 %) o Li Auto (+1,85 %). Xiaomi, que acaba de lanzarse al ruedo de los eléctricos con su SU7 pero que aún no vende en el extranjero, era otra de las que amanecía teñida de verde (+1,4 %).
En los mercados de la China continental, subidas algo más modestas para nombres como Great Wall (+0,24 %) o Changan (+0,45 %), y la gran excepción del día: SAIC, que bajaba un 2,18 % después de que la Comisión Europea anunciase que le aplicaría el máximo propuesto de aranceles adicionales: un 38,1 %.
La Comisión anunció el miércoles aranceles medios del 21 % para las automotrices que cooperaron en la investigación, y del 38,1 % para las que no, cifras que se sumarán al 10 % que ya se aplicaba hasta ahora. Se espera que entren en vigor de forma provisional antes del 4 de julio y de forma definitiva en noviembre.
La cifra media es algo inferior a la avanzada por el influyente diario británico Financial Times, que apuntaba que los aranceles adicionales podrían ser de un 25 %, lo que ayer provocó caídas generalizadas para las automovilísticas chinas en bolsa.
Cabe destacar que estas tasas no se aplicarían a los eléctricos de marcas chinas que se fabriquen en plantas situadas en la UE.
El Ejecutivo comunitario basó su decisión en los resultados preliminares de la investigación que inició el pasado mes de octubre para averiguar hasta qué punto la penetración de vehículos eléctricos del gigante asiático en el mercado comunitario afectaba a los fabricantes europeos.
Tras las pesquisas, se llegó a la conclusión de que la cadena de suministro de vehículos eléctricos se «beneficia, en gran medida de subvenciones injustas en China» que «presentan una amenaza claramente previsible e inminente a la industria de la UE».
La reacción de Pekín no se hizo esperar: tras el anuncio, el Ministerio de Comercio de China aseguraron que la decisión es «infundada y proteccionista» y exigió a Bruselas que corrija de inmediato sus «prácticas erróneas».
En las últimas semanas, la prensa estatal china ha avanzado posibles represalias como un alza de tasas a la importación de vehículos de gran cilindrada o investigaciones ‘antidumping’ contra los lácteos o el cerdo provenientes de Europa. Esto último afectaría especialmente a España, ya que se trata del principal exportador de carne porcina a China.