Por- Víctor Cruz- Economista
Diálogos, foros, informes de la concertación nacional, debates y artículos de opinión, se han centrado por años en buscar la forma de mantener a flote el Sistema Panameño de Pensiones (SPP), el cual tiende a generar grandes pasiones.
Para muchos analistas, el Gobierno Nacional ha desatendido múltiples problemas, no porque los desconocieran, sino por la falta de ejecución de soluciones integrales y no simples parches, y ello nos tiene hoy día al borde del Knock Out, porque las decisiones que deben aplicarse implican un elevado costo financiero, pero sobre todo político.
El informe que recién entregó la Organización Internacional del Trabajo (OIT) titulado Valuación del Sistema Actuarial del Sistema Panameño de Pensiones, ha revelado una serie de situaciones que hoy marcan el estado actual de la CSS.
La Caja de Pandora, como símil del Informe, no destapa infinidad de calamidades como las personas creen, ya que, según la mitología griega, es la Esperanza como elemento de sosiego de la humanidad lo que en verdad contiene esta, y este Informe enfatiza en todas y cada una de las cosas que debieron atenderse.
El tema financiero es el que acapara la atención del panameño común. Las finanzas de la CSS no andan bien desde hace rato. Un informe del director general reveló que en el 2023 las RESERVAS de nuestro Sistema Solidario de Pensiones se agotan. Pues bien, el documento que recién entregó la OIT confirma eso y saca a relucir otras situaciones que agravan aún más el estado de situación de la CSS.
Desde problemas administrativos de gestión integral, como también la evaluación financiera del Programa de IVM, pero además destaca un error de Diseño en el Modelo utilizado en 2005 para realizar las previsiones futuras, luego de poner en práctica decisiones previamente adoptadas en los Diálogos anteriores para darle viabilidad al Sistema de Pensiones. CRASO ERROR.
Las protestas protagonizadas meses atrás y la Mesa de Diálogo constituida como mecanismo de mitigación de estas, indicaban algunos de sus voceros entre otras cosas, que no había que evaluar ni parámetros ni variables, y que lo conducente era regresar al Sistema Solidario y santo remedio.
Un tema tan complejo requiere la revisión de una serie de elementos vitales, que a todas luces son los que permitirán sacar de la Sala de Cuidados Intensivos al sistema de pensiones panameño, independientemente si es el Sistema Exclusivo de Beneficio Definido (SEBD o Solidario) o el Subsistema Mixto (SSM) o como se ha sugerido en el Foro del CONEP, redefinir el rol que hacia adelante debe desarrollar la CSS.
Las variables permitirán determinar los ajustes necesarios para viabilizar el Sistema y entre ellas se deberá evaluar, como variables macro al Crecimiento Económico el cual está definido por el Consumo, la Inversión y el Empleo.
Igualmente entra en juego la Formalidad o la Informalidad de la fuerza laboral, ya que de estas dos (2) variables se determina la Cobertura Contributiva o la base que sostendría el sistema especialmente uno de tipo solidario. Aunado a ello, el género, edades, Esperanza de Vida, niveles de sueldo, cantidad de cuotas, aportes obrero- patronal, niveles de reserva legales, entre otras.
Como se aprecia, la modelación que se requiere para tomar decisiones depende de esas variables, por lo que la Parametrización no es algo que se pueda obviar, por más que algunos grupos consideren que sí se puede. Pues no es así.
Por el lado administrativo, la OIT destaca problemas en los procesos centrales como en la gestión de la cobertura contributiva y de los ingresos, afiliación, recaudación, inspección y control contributivo, así como aspectos financieros contables.
En cuanto a la estructura orgánica de la CSS y su funcionamiento “no visibiliza con claridad el nivel de importancia relativa del Régimen de IVM en términos de las disposiciones previstas en la Ley”.
Funciones administrativas estratégicas en la administración del Régimen, como “la validación y asignación de las pensiones, la administración de cuentas individuales, el pago de las prestaciones, y la gestión de las inversiones”, entre otras, son esenciales para garantizar un desempeño eficiente.
Muy preocupante es lo referente al área Actuarial en la cual son dos (2) instancias, el Departamento Actuarial de la CSS y la Junta Técnica Actuarial (JTA), cuyas funciones y responsabilidades en la gestión del Régimen de IVM no están claras, y se deja entrever que es fundamental la separación e independencia de sus funciones, con el fin de cumplir con los estándares internacionales y para ello la OIT ofrece apoyo técnico en materia de modelación actuarial.
Otro tema que llama la atención es que la CSS no lleva una contabilidad financiera individualizada de las cuentas individuales del Sistema Mixto, lo cual a juicio de la OIT requiere seguimiento especializado del mercado de capitales debido a lo volátil del mismo, ya que esto afecta el rendimiento de las cuentas individuales, así como el de las inversiones que la CSS considere oportuno realizar para mejorar los ingresos.
El informe en cuestión muestra cómo está integrado el SPP y deja entrever, sin especificar, cuales podrían ser las reformas que se requieren, para al menos, establecer un período de transición hacia una mejor estructurada CSS y un sistema de pensiones con viabilidad financiera a largo plazo.
Las propuestas a mi modo de ver están presentes en dicho Informe, toca escoger la combinación de variables que permitan que las decisiones que se adopten marquen un período de transición para redefinir el nuevo rol de la CSS y brinde sostenibilidad al futuro SPP.