Hace un año, por iniciativa del presidente Laurentino Cotizo Cohen, se puso en marcha el programa de agrodistribuidoras en el corregimiento de Hato Julí del distrito de Mironó, en la comarca Ngäbe Buglé, donde se han beneficiado más de 15 mil habitantes.
Esta es la primera de las nueve instalaciones comerciales habilitadas en esa región del país, como resultado de los compromisos adquiridos por el Gobierno Nacional en la Mesa de Diálogo por Panamá, para facilitar el acceso a productos de la canasta básica familiar.
La inauguración de la primera agrodistribuidora le correspondió al presidente Laurentino Cortizo Cohen quien señaló en aquella ocasión que “es un día histórico, porque estamos inaugurando la primera de nueve, con productos a bajos precios, cumpliendo lo acordado con la población comarcal”.
Ese primer centro de comercialización minorista tuvo un costo de 122 mil balboas, mientras el total de las nueve que están operando alcanzaron una inversión de B/.1,107,722.03
La apertura de estos 9 centros permite que pequeños comerciantes puedan ofrecer a la población alimentos de la canasta básica a precios accesibles.
Al respecto, el director general del IMA, Carlo Rognoni Arias, destacó que el gobierno apoya y no compite con los comercios de la comarca, ya que estos se benefician con la distribución de alimentos baratos.
El Instituto de Mercadeo Agropecuario (IMA), responsable de la administración de estos centros de distribución, asume los costos de enviar productos de la canasta básica como arroz, aceite, tunas, frijoles, azúcar, sal, entre otros.
Rognoni, agregó que las agrodistribuidoras son un concepto novedoso ideado por el presidente Cortizo y sus resultados están beneficiando a la población.